El verano es una de las estaciones favoritas por las vacaciones, la playa, el sol y todo lo que se relaciona con él y lo que podemos hacer durante su estadía. Pero es también una temporada de un sol súper fuerte y calor con picos altísimos de temperatura. Por eso el cuidado de la piel y el cuerpo debe ser especial en el verano. Te damos algunos consejos para poder disfrutarlo sin sufrir.

Casi todo el mundo adora el verano y todo lo que se puede hacer en él. Playa, pileta, montañas, vacaciones: todo es felicidad hasta que estamos bajo el intenso sol, nuestra piel se quema y viene la insolación… O puede ser que de repente un golpe de calor puede aparecer. Para que esto no suceda debemos preparar la piel y el cuerpo para el verano. Aquí van algunos consejos:

  • Cuidado de la piel del Rostro

La piel del rostro no es la misma que la del cuerpo, es mas fina y sensible y por ende, hay que protegerla de la manera especial.

Primero, es aconsejable limpiarla. Retirar restos de sudor y suciedad va a permitir que la piel respire. Aqui pueden ser muy útiles limpiadores como el limpiador y desmaquillante con Jojoba Bioterra que ayudará a tenerla bien humectada a la piel. Ya que eso será clave: nutrir la piel. A esa limpieza nutritiva le podemos agregar un bálsamo o crema bien espesa que le va a dar un escudo protector durante todo el día. En ese caso se puede aplicar, luego de una rutina diaria, un bálsamo con manteca de karité como el de Bioterra y esparcirlo con agua.

También se pueden aplicar aceites vegetales para cada tipo de piel y dejar actuar y solo retirar excedente luego de un rato para que la piel absorba todo lo que necesita.

Luego de esta rutina diaria, aconsejamos aplicar un protector solar natural que pueda proteger sin aplicar químicos ni tóxicos en la piel.

 

  • Cuidado de la piel del cuerpo

El mismo proceso de limpieza y nutrición también aplica aquí, pero también podemos sumar un jabón natural que además puede refrescar, como el de menta. Luego de esta limpieza básica, también aplicamos el bálsamo de karité en todo el cuerpo. El mismo producto es ideal, además, para las típicas insolaciones e irritaciones de la piel por la exposición indebida al sol.

Otro producto ideal para llevar a todos lados es el tónico facial y corporal que tonifica y refresca, aun en pieles ultra sensibles y con rosácea.

 

  • Alimentación

Si hablamos de alimentación saludable en el verano, tenemos que hablar de alimentos refrescantes, frugales, de fácil digestión, livianos y con gran cantidad de agua. Verduras y frutas, las vedettes de la temporada.

Verduras de hoja como lechuga, espinaca, albahaca pueden hacer un colchón para ensaladas que pueden mixarse con palta, tomate y lo que mas te guste.

En cuanto al consumo de frutas, aconsejamos que sean de estación y no consumir en exceso por los altos niveles de fructuosa. Muchas veces el exceso de frutas pueden generar exceso de fructuosa e intolerancia, lo que genera gases, hinchazón o malestar al llegar al colon donde fermenta. El consumo elevado puede llegar a generar un aumento de triglicéridos y ácido úrico. Por eso recomendamos, todo en su medida y armoniosamente.

 

  • Aire libre y actividad física

Como siempre aconsejamos, la clave de todo es poder estar en equilibrio con la naturaleza, realizando actividades al aire libre. Al estar al sol (con su debida protección) , la piel produce vitamina D, que ayuda a absorber calcio y fósforo lo que fortalece los huesos, dientes y previene la osteoporosis. Si ademas realizamos actividades físicas o deportes, mejor aun. La actividad física mejora la salud física y mental: reduce el riesgo de enfermedades crónicas,  fortalece el sistema muscular y óseo. Y por supuesto, ayuda a equilibrar la energía, el ánimo y sentirse bien.